El yayo era músico y la yaya cosía…a él nunca lo llegué a conocer pero quizás por eso, el muy pillo, me mandó con los años a otro músico para que compartiera conmigo mi vida :)…a la yaya yo la veía coser y me me encantaba ver como de un trocito de tela me hacía una falda para las muñecas…desde mi casa se veía la suya y a menudo me asomaba por la ventana a ver si estaba en la suya y me decía hola ;)

Mientras que la familia  mi padre era del pueblo la de mi madre era más de ciudad. Los primeros Magros habían venido de la Isla de Malta creo recordar en el siglo XVIII y la historia de estos dos hermanos despertaban de niña mis fantasías de países y mares lejanos…

Los abuelos vivian en una casa de esas de techos altos, grande con muchos escondites y en la puerta de entrada tenía una ventanita que mi abuela siempre habría juguetona preguntando que quienes éramos. Le encantaba hacer ganchillo utilizando lanas de muchos colores. Más de una vez he pensado en ella y en las cosas que podriamos haber hecho combinando sus ganchillos multicolores y las costuras de la yaya.

Los cuatro están siempre presentes en mi y son una parte feliz en los recuerdos de mi niñez por ello pienso que la figura de los abuelos es muy importante en la vida de los nietos y he querido  que mis hijos la vivieran de la manera más cercana posible.

Por ellos, por todos los abuelos buenos del mundo mis palabras de hoy y mi más sincero agradecimiento ♥

Dolça por que también un día fui nieta :)