El domingo volvíamos a Valencia con motivo de los talleres de música clásica India que Sazed imparte en AVAMUN, por lo que aproveché como en otras ocasiones para ver que ingredientes me regalaba la ciudad para seguir creando…
Fue un día de esos repletos de encuentros con gente bonita…de esos que hacen que ayer, la semana, empezara con otro color…Lo comenzaba, nada más llegar a Valencia, con Natalia de CREAeSPIRIT, una de las artistas, que conocí hace unos años en el Foro del Cambio y que también estuvo con nosotros con su cámara la noche Lyrical Blend.
«El día que yo cogí por primera vez un pincel (me explicaba ella con una gran sonrisa), ese día, en el que yo empece a pintar con colores, ese día(volvió a repetir para comprender la intensidad de aquel día), entendí que nunca más volvería a estar sola»…me recordó a una conversación que hace un tiempo tuve con un periodista, en la cual, tras preguntarme por la importancia de la pintura y la creatividad en el proceso educativo de los niños, yo le contestaba, que era tan importante, entre otras cosas, porque hay momentos en la vida, que tan solo con un lápiz y un papel te puedes sentir acompañado…la creatividad siempre está contigo y se convierte en tu mejor compañera.
A continuación me pasé un momento por el MUVIM, un museo donde siempre encuentro exposiciones divertidas, había una exposición de los cuentos e ilustraciones de los hermanos Grimm y pensé en volver más tarde a verla junto con mi amiga Mónica, había un murmullo de gente que salía contenta de un espectáculo en el salón de actos y como me gustaba lo que escuchaba, decidí entrar a conocer a aquel mago del que la gente hablaba tan entusiasmada, era el mago Angel Blanco, que estaba ya recogiendo su magia, y pensé que a ver si me echaba una cuanta :)
Y volví a AVAMUN para ver que estaba sucediendo y me encontré con ellos y ella , la música…
Y entonces me dí cuenta que tocar el sitar, es también bailar con él…
Después llegó la tarde y con ella la «Diversión en el MuVIM»… como los días están llenos de tantas cosas como pensamientos, pues, en el mismo museo donde, no hace mucho, conocí más de cerca la obra de Paco Roca, me encontré con el mago maravilloso Angel Blanco y pude charlar un poquito con él y por arte de magia, un ratillo después, estábamos, mi amiga Mónica y yo, dentro de los cuentos de los hermanos Grimm y mientras ella le giñaba un ojo al lobo, ayudé a Caperucita a llevarle flores a su abuelita, también jugamos con él, que en realidad no era tan malo, por un camino nos encontramos con un gigante y peleamos, dos minutos de nada, para que nos dejara pasar y dimos besos, muchos besos, a un sapo o era una rana? le besamos y le besamos esperando que se convirtiese en príncipe…pero nada, no hubo forma, debía ser que ya teníamos dos y no necesitábamos más, me probaron también un zapatito que me quedaba perfecto para seguir bailando la vida y aunque sabíamos, que las manzanas de las brujas, no se pueden comer, le dimos un mordisquito para saber qué pasaba después…
El día que yo cogí un pincel, el día que yo empecé a pintar…
Dolça ♥
5 respuestas a El día que yo cogí un pincel…