Dibujando la Sinagoga más grande del mundo…

Os acordáis del día que estaba intentando dibujar la Sinagoga más grande de el mundo en lo que dura una pausa caminando por la ciudad de Budapest, y que dudaba de si me cabría en mi humilde moleskine?
Bueno, pues así quedó resumido. Cuando disfrutas de los pequeños detalles, los viajes duran más…

Sinagoga de Budapest

Antes de empezar, le pedí el sello a la camarera y curiosa me preguntó que le enseñara otros dibujos y así le hablé de Nena, la gatita de Mónica que ya no está con nosotros, lo fresquita que estaba el agua en el dibujo de mis pies mojándose en el mar de una calita de la playa de Santa Pola del Este, un dibujo en tren sobre el Öresunbron de camino hacia Copenhagen, a Kajol y Sazed en un café, una columna del Centro Cultural Gómez Tortosa de Novelda, a Sazed tocando una noche la guitarra, le conté también que tenía una hija que jugaba al balonmano, el dibujo de aquella China en el tren camino de Shanghai, la clase de sitar de Sazed y Mohinder, mi padre y su tía Cariño, la canasta de baloncesto que dibujé en Benidorm el día que mi hijo Ismael hizo su primer trabajito como comentarista deportivo, la tarde que estuve dibujando a los bailarines de Otra Danza, Khuku en Bangladesh…

Cuántas vivencias me acompañaban en un solo cuaderno…

Dolça

 

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