Hace uno días, mi hijo mayor me enviaba un enlace con la triste noticia de Cecil, el león insignia de Zimbabue… recordé entonces un texto que encontré escrito en el reverso de la etiqueta de unos pantalones que le compré, precisamente a él, cuando viajamos en el 2002 a Sudáfrica y que me gustó tanto que lo pegué en mi cuaderno de viaje, porque yo también deseaba lo mismo que Liz, aquella niña de 9 años que lo escribió: «No quiero que todas las plantas y animales se hayan ido cuando sea mayor. Quiero ser capaz de explorar junglas y montañas y ver elefantes y otros animales en el lugar donde pertenecen».
11 años después, pudimos entonces cumplir el sueño de exactamente eso: Explorar y encontrar los animales en el lugar al que pertenecían, y solamente observar que aquello era posible, fue uno de los momentos más felices que he vivido. Cuánto me gusto encontrarme con las cebras y la familia de las jirafas por sorpresa… os dejo el vídeo de uno de esos momentos, no se escucha muy bien por el viento, pero estuvo cargado de emoción: Pasión, paciencia y suerte
Mi mayor deseo para la tierra es ese, que por mucho que evolucionemos, la naturaleza siga ahí, virgen e intacta…
Un abrazo!!!
2 respuestas a Cecil…